El embarazo es un periodo lleno de emociones, cambios y, sin duda, muchas preguntas, especialmente en lo que respecta a la dieta. Una de las dudas más comunes entre las futuras madres es sobre el consumo de pescado, específicamente salmón. Este pescado, conocido por ser rico en nutrientes esenciales, es altamente recomendado por sus beneficios tanto para la madre como para el bebé en desarrollo. Sin embargo, no todo el salmón es igual, y es importante entender cómo consumirlo de manera segura durante el embarazo.
Beneficios del salmón durante el embarazo
El salmón es una fuente excepcional de nutrientes clave durante el embarazo, especialmente de ácido docosahexaenoico (DHA), un tipo de omega-3. Este nutriente es crucial para el desarrollo cerebral del bebé y también ofrece beneficios para la salud de la madre.
Estudios han demostrado que una ingesta adecuada de DHA durante el embarazo puede influir positivamente en el desarrollo neurocognitivo del bebé. De hecho, se ha observado que los niños cuyas madres consumen entre 225 y 340 gramos de pescado por semana durante el embarazo tienen un coeficiente intelectual más alto en comparación con aquellos cuyas madres no lo hicieron.
Además del DHA, el salmón es rico en proteínas, vitaminas como la D y B12, y minerales como el selenio, todos ellos esenciales para un embarazo saludable. Consumir salmón también puede contribuir a reducir el riesgo de parto prematuro, una preocupación común entre las futuras madres. Mantener un consumo regular de salmón, dentro de los límites recomendados, puede ayudar a alcanzar una gestación a término, lo cual es crucial para el bienestar del bebé.
Entonces, ¿es seguro comer salmón crudo o ahumado durante el embarazo?
Si bien el salmón tiene numerosos beneficios, no todos sus tipos son seguros para consumir durante el embarazo. Según los expertos, el salmón crudo y el ahumado deben evitarse. El riesgo principal asociado con estos tipos de salmón es la posibilidad de contraer una infección por listeria, una bacteria que puede encontrarse en alimentos refrigerados y listos para comer. La listeria es especialmente peligrosa durante el embarazo, ya que puede provocar complicaciones graves, incluyendo aborto espontáneo, muerte fetal o parto prematuro.
Por lo tanto, es crucial que cualquier salmón que consumas esté completamente cocido. Esto significa cocinar el salmón hasta que alcance una temperatura interna de 63 grados Celsius. Cocinar el salmón a esta temperatura asegura que cualquier bacteria potencialmente dañina sea eliminada, haciéndolo seguro para su consumo.
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Cantidad recomendada de salmón durante el embarazo
Otro aspecto importante a considerar es la cantidad de salmón que se debe consumir. Las autoridades sanitarias, como la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) y la Agencia de Protección Ambiental (EPA), recomiendan que las mujeres embarazadas consuman entre dos y tres porciones de pescado bajo en mercurio por semana, incluyendo el salmón. Cada porción debe ser de aproximadamente 113 gramos.
El mercurio es un contaminante que puede encontrarse en ciertos tipos de pescado y que puede ser perjudicial para el desarrollo cerebral del bebé si se consume en grandes cantidades. Afortunadamente, el salmón es una de las opciones de pescado con menor contenido de mercurio, lo que lo convierte en una excelente opción para las embarazadas. Sin embargo, es importante no exceder las porciones recomendadas para evitar cualquier riesgo asociado con la exposición al mercurio.
¿Qué tipo de salmón es mejor: de granja o salvaje?
Tanto el salmón de granja como el salvaje son seguros y saludables para consumir durante el embarazo. Investigaciones recientes han demostrado que ambos tipos de salmón contienen niveles bajos de mercurio y otros contaminantes.
Sin embargo, existen algunas diferencias nutricionales entre los dos. El salmón salvaje tiende a ser más bajo en grasas y calorías, mientras que el salmón de granja puede contener más ácidos grasos omega-3 debido a su alimentación.
Al final, la elección entre salmón de granja o salvaje puede basarse en preferencias personales y disponibilidad. Lo más importante es asegurarse de que esté completamente cocido y de consumirlo dentro de las cantidades recomendadas.
Mantener una dieta balanceada durante el embarazo
Aunque el salmón es un alimento altamente beneficioso, es fundamental que forme parte de una dieta equilibrada. Además de incorporar pescado bajo en mercurio, como el salmón, es importante consumir una variedad de alimentos que aporten otros nutrientes esenciales. Incluir frutas, verduras, granos enteros, legumbres y proteínas magras en tu dieta contribuirá a un embarazo saludable.
Asimismo, es esencial mantener un seguimiento regular con tu proveedor de atención médica durante el embarazo. Ellos podrán brindarte consejos personalizados sobre tu dieta y asegurarse de que tanto tú como tu bebé estén recibiendo todos los nutrientes necesarios.
Como vemos, el salmón es una excelente opción para las mujeres embarazadas, siempre y cuando se consuma de manera adecuada. Asegurarse de que esté completamente cocido y no exceder las cantidades recomendadas son pasos clave para disfrutar de sus numerosos beneficios sin riesgos.
Este pescado no solo es seguro, sino que también puede contribuir al desarrollo saludable de tu bebé y a tu bienestar durante el embarazo.
Referencias utilizadas:
- Mercury levels in commercial fish and shellfish (1990-2012). U.S. Food and Drug Administration. 2022.
- Dack K, Fell M, Taylor CM, Havdahl A, Lewis SJ. Prenatal Mercury Exposure and Neurodevelopment up to the Age of 5 Years: A Systematic Review. Int J Environ Res Public Health. 2022;19(4):1976. Published 2022 Feb 10. doi:10.3390/ijerph19041976
- Taylor CM, Golding J, Emond AM. Blood mercury levels and fish consumption in pregnancy: Risks and benefits for birth outcomes in a prospective observational birth cohort. Int J Hyg Environ Health. 2016;219(6):513-520. doi:10.1016/j.ijheh.2016.05.004